5. Recuperación de la zona
En las páginas anteriores se ha puesto de manifiesto que los suelos de la zona han quedado con una contaminación moderada a alta (a fecha de muestreo 4/5/98).
Habrá pues que hacer un seguimiento periódico de la contaminación y realizar determinaciones con diversos agentes extractantes para analizar la especiación de los metales pesados, para así poder evaluar su grado de peligrosidad y su posible comportamiento en los suelos.
Una vez retirados los lodos, es perentorio realizar unos análisis para evaluar cómo han quedado los suelos. Para ello se ha realizado un intenso muestreo de la zona con una malla aleatoria de 100 puntos muestrales. En cada punto se han tomado tres muestras a distintas profundidades: 0-10, 10-30 y 30-50cm.
Los resultados que se están obteniendo recomiendan realizar las siguientes acciones:
 Diluir la contaminación superficial 
  llevando a cabo un arado profundo para mezclar la capa superficial, la más 
  contaminada, con los niveles subsuperficiales, lógicamente, menos contaminados. 
  Operación válida sólo para los suelos poco contaminados.
Diluir la contaminación superficial 
  llevando a cabo un arado profundo para mezclar la capa superficial, la más 
  contaminada, con los niveles subsuperficiales, lógicamente, menos contaminados. 
  Operación válida sólo para los suelos poco contaminados.
 Realizar una segunda limpieza en los suelos 
  que han quedado con lodos en el horizonte superficial.
Realizar una segunda limpieza en los suelos 
  que han quedado con lodos en el horizonte superficial.
 Neutralizar urgentemente la grave acidez que 
  se ha producido en los suelos que no contenían carbonatos. Para ello 
  se propone una extensa enmienda caliza.
Neutralizar urgentemente la grave acidez que 
  se ha producido en los suelos que no contenían carbonatos. Para ello 
  se propone una extensa enmienda caliza.
 Añadir materiales con capacidad de 
  fijación de metales pesados, como compuestos de Fe, arcillas, abonado 
  orgánico, etc.
Añadir materiales con capacidad de 
  fijación de metales pesados, como compuestos de Fe, arcillas, abonado 
  orgánico, etc.
 Sembrar plantas que vayan absorbiendo los 
  metales, recolectar y almacenar periódicamente las plantas y dejar la 
  zona protegida frente a una no deseable utilización agrícola.
Sembrar plantas que vayan absorbiendo los 
  metales, recolectar y almacenar periódicamente las plantas y dejar la 
  zona protegida frente a una no deseable utilización agrícola.